Comenzamos la segunda vuelta del campeonato liguero, con un poco más de lo mismo que la semana pasada. El Barcelona y el Madrid salieron reforzados de que sus dos perseguidores (Sevilla y Valencia) se enfrentaba en el Pizjuán. Pero vamos… que ellos van a lo suyo; tanto culés como merengues ganaron sus respectivos partidos fuera de casa (hay que joderse: entre Primera y Segunda Divisón se pueden contar con los dedos de la mano aquellos que han ganado en casa esta semana).
Y si la semana pasada hablábamos de que el Atlético y el Villarreal estaban remontando… pues hoy lo contrarios: ambos perdieron, y ambos en casa, cuando una imagen lamentable. Grande el Kun dando la cara y diciendo la verdad sin tapujos. La derrota le costó cara a Valverde: fue rescindido del Villarreal y lo propio hizo Mendilibar en el Valladolid.
Pero bueno, vamos a lo importante.
No estaban ni Higuaín, ni CR9 (ni la mitad de la plantilla)… pero ni falta que les hizo. El Madrid ganó en casa del Depor (1-3) con dos goles de Benzemá (ya era hora), el primero de los cuales fue una auténtica obra de arte, con un pase de tacón de Guti al francés cuando el meta ya estaba en el suelo, para dejarle a puerta vacía. Magistral. De lo mejor que se ha visto en años. Con Guti siempre es lo mismo: polémicas y golazos. Nada nuevo en Chamartín.
Y Negredo (recordemos: vendido por el Madrid en verano) se picó: otros dos goles (también ya era hora) ante el Valencia (2-1), el segundo de los cuales fue otra obra de arte, con Navas pasándole el balón de tacón y Negredo finalizando con un tiro magistral (no era como el de Benzemá; César no estaba ni mucho menos batido, se lo tuvo que fabricar).
Ojalá que esto siga así hasta el final del año y Del Bosque se pase semanas sin dormir pensando en quién llevará al Mundial. Que a gusto se paga la entrada y los partidos por PPV con jugadas así…
Muchas horas de radio y televisión, y cientos de hojas de periódico analizando tonterías. Que si los fichajes del Madrid no valen, que ninguno a funcionado; que Kaká está acabado, que Xabi Alonso no es el mismo que el del Liverpool, que Benzema no le mete ni un gol al arcoiris…
En lo que no hay duda, es en que Cristiano Ronaldo es un crack. Vuelve de una lesión y casi la lía en el Camp Nou, falla un penalti (que él mismo provocó), mete un gol ante el Almería… y lo expulsan por quitarse la camiseta (bueno, no por eso, pero ya me entendéis). Y anoche va el tío y le mete dos goles al Olympique de Marsella para ponerse como pichichi de la Champions y de paso colocar al Madrid como líder de grupo. Uno de los goles, por cierto, desde 37 metros. La locura.
Veremos qué pasa, pero… sólo recordar que la Champions es el objetivo primordial de Florentino Pérez este año… por algo, no obstante, se juega la final en el Bernabeu.
Los jugadores del Atlético Baleares no pudieron ir el pasado sábado por la noche a Amnesia (emblemática discoteca de Ibiza) porque los del Sant Rafael les aguaron la fiesta, y nunca mejor dicho.
Vinieron a jugar como líderes y favoritos en el campeonato de Tercera División, dispuestos a sumar tres puntos fáciles y ligarse a las guiris ibicencas entrando by the face en la disco.
Pues ni una cosa ni la otra.
El Sant Rafael les dominó el encuentro desde el principio y les ganó 2-0, con un gol en propia puerta y un golazo de vaselina de Adrián Ramos en el descuento, a pase de Torres. Con este triunfo, el segundo consecutivo y el primero de esta temporada en casa, los pitiusos son co-líderes de la división habiendo sumado seis puntos de los seis posibles y confirmando los buenos augurios que se habían dejado ver durante la pretemporada. Un fútbol serio, de posesión, aprovechando al máximo sus oportunidades y estando muy concentrados durante los noventa minutos, con un Tomás Rojo imponiendo galones en el campo.
Esperemos seguir contando de aquí a final de temporada la imparable galopada del equipo de Mario Ormaechea (ex del Yeclano) hacia la Segunda B.
El fútbol mundial se pone en marcha. Con la mitad de las ligas europeas ya comenzadas, en España aún nos estamos comiendo las uñas para que empiece la liga BBVA y se acaben esos partidos amistosos con veinte jugadores del filial y esos trofeos que no sirven para nada más que para hacer caja.
Aún así, anoche vivimos un caso curioso al poder disfrutar de varios encuentros destacables: el Real Madrid contra el Borussia Dortmund, el F.C. Barcelona contra el Manchester City y el Atlético de Madrid contra el Panathinaikos. Sobre todo éste último, por tratarse de un partido donde sí estaba en juego algo, ya que los pupas se juegan el estar la temporada que viene jugando la Champions con esta eliminatoria previa.
Sin que sirva de precedente, los de Abel se marcaron un partidazo jugando fuera de casa con tres golazos de sus figuras: Maxi, Forlán y sobre todo Aguero, imitando a su compatriota Messi con una jugada de megacrack. (2-3, resultado final).
El Madrid, por su parte, sigue poniendo la bestia a punto y goleó a los alemanes 0-5 como regalo por su centenario. Robben e Higuaín vuelven a demostrar que este año por fin hay banquillo de lujo y hasta Raúl -el que nunca hace nada – tuvo su golito. No deslumbra, pero ya empieza a asustar.
El Barsa se llevó el varapalo al perder su trofeo Joan Gamper contra el Manchester City de Robinho y Tévez, por la mínima (0-1) y ante un público entusiasmado por el debut de Ibrahimovic, que no pudo hacer gran cosa rodeado por los alevines culés.
La justicia del fútbol. Me entregué a ver los dos partidos que concluían la MuermoCup con cierto tedio, pero tampoco tenía plan mejor para el domingo por la tarde, aparte de seguir llorando en todos los canales la desaparición de Michael.
Primero jugó España, un partido difícil; no por el rival, sino porque ganándolo no conseguía nada y perdiéndolo echaba por tierra toda la euforia conseguida el pasado año contra Alemania. Y las cosas se le pusieron difíciles cuando la anfitriona (con sus trompetas irritantes incluidas) se le adelantó en el marcador. Después de eso la locura. Guiza demostrando que sabe meter la polla… digo, la pelota, aparte de salir de fiesta. Por dos veces, en el minuto 87 y en el 88. Una remontada en plan MisiónImposible. Regresa la euforia. Confieso que desconecté del partido y me fui a hacer otras cosas cuando de repente oigo por la radio: ¡Gol! ¡Golazo, la que nos acaban de enchufar! Fui a comprobarlo. Efectivamente: un golazo, nada que objetar.
Me temí lo peor, con unos jugadores que ya están pensando en quién les va a fichar y en dónde van a pasar sus vacaciones, hartos de una competición donde no se jugaban nada. Pero en la prórroga apareció Xabi Alonso (que en la radio dan por hecho como otro de los fichajes del Real Madrid este verano) y nos quitó todasl as dudas. Tres goles, el tercer puesto y para casa.
Luego tocaba Brasil, que pensé que iba a barrer a Estados Unidos. Nada que ver. A los diez minutos los yanquis ya ganaban por 1-0. Muy bien cerrado atrás, con un portero jugadon a ser Casillas y una defensa que lo cortaba todo. Otra contra de libro como contra España y se van al descanso con el 2-0.Increíble. Obama aplaudiendo desde la Casa Blanca.
Pero lo tenían todo bien planeado. Hay que aprender de estos brasileños. Salieron del vestuario con el cuchillo entre los dientes. Nada de samba, era la hora de la capoeira. A los cuarenta segundos Luis Fabiano se ponía pichichi y acercaba el marcador. Luego Kaká le ponía en bandeja el empate y la consolidación de máximo goleador. Y con una Estados Unidos que ya no podía ni con su alma y una Brasil volcada, Lucio confirmaba el milagro y sentenciaba a la salida de un corner.
Como decía: la justicia del fútbol. Ganó el mejor. Que aprenda España.
Escrito por elmanguera 
¡¡¡Visitad: 
Mi plan para dominar el mundo 